La Escritura nos dice que hay muchas cosas que pueden entorpecer nuestras oraciones. Una de ellas es la falta de perdón. Dios sabe que tener falta de perdón es destructivo porque levanta una pared entre nosotros y Él.
Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo
contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone
a vosotros vuestras ofensas.
MARCOS
11:25 RVR1960
Muchas veces, las personas se preguntan por qué
sus oraciones no son respondidas. Se sienten distantes de Dios, pero no pueden
explicar la razón. Aman a Dios y tratan de hacer todo lo bueno; sin embargo,
profundo, en su interior, sienten que algo no está bien.
La Escritura nos dice que hay muchas cosas que
pueden entorpecer nuestras oraciones. Una de ellas es la falta de perdón.
Dios sabe que tener falta de perdón es destructivo
porque levanta una pared entre nosotros y Él. Sin embargo, cuando escogemos
perdonar, la pared cae. Alguien lo dijo así: “Perdonar es poner en libertad al prisionero y darse
cuenta que el prisionero era usted”.
Cuando vaya ante Dios en oración, pídale que
examine su corazón y su mente. Vea si hay alguna falta de perdón que esté
bloqueando sus oraciones y afectando su relación con Él. La otra persona pudo
haber estado mal, tal vez le hirió profundamente, pero no hay nada en esta
tierra que valga la pena perder su paz con Dios todopoderoso.
El perdón no disculpa a la otra persona; sino
significa que usted está confiando en Dios con todo su ser. Hoy, cuando ore,
elija el perdón y ¡no permita que nada se interponga en el camino de las cosas
buenas que Dios le tiene reservadas en su futuro!
Oración para hoy
Padre, te amo y hoy vengo humildemente ante ti con
un corazón abierto y dispuesto. Examíname. Conóceme. Muéstrame si hay falta de
perdón en mi vida o cualquier cosa que te desagrade. Gracias por mostrarme tus
caminos para que yo pueda caminar contigo en paz todos los días de mi vida. En
el nombre de Jesús. Amén.
Pensamiento para despertar
Usted puede tener éxito por fuera, pero si tiene
falta de perdón y amargura por dentro, eso arruinará y empañará toda victoria.
Nosotros intentamos amontonar la falta de perdón, el resentimiento y la ira en
nuestros recipientes “herméticos”, pero un día, las cosas que ha comprimido en su
subconsciente o enterrado profundamente en los recovecos de su corazón saldrán
a la superficie. El perdón es la clave para ser libres de la tóxica amargura.
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